Volví a ver una parte de Comer, rezar, amar y me encontré con este viejo dicho que me encantó:
Un mendigo le reza a la estatua de un santo. Le pide una y otra vez:
—Por favor, por favor, por favor: dejame ganar la lotería.
Un día, la estatua se cansa y le responde:
—Por favor, por favor, por favor: comprá un boleto.
Hay que confiar, sí. Hay que pensar en positivo, también. Pero falta la otra mitad, la de accionar, dar el primer paso, estar en en el lugar correcto en el momento correcto.
“Cuando llegue la inspiración, que me encuentre trabajando” dijo Picasso.
Jamás vamos a ganar la lotería —metafórica o no— si no compramos el boleto.
Hay que poner nuestra parte.
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