Olvida el cliché de “dar un salto al vacío”. No siempre funciona, se siente horrible (hola, ansiedad) y además, puede generar mucho más miedo de lo necesario.
¿Por qué no ir paso a paso?
No suena tan glam, no. Pero es igual de poderoso y además sostenible en el tiempo.
Tu objetivo no es saltar, ni estrellarte.
Tu objetivo es seguir en movimiento, un poquito cada día, construyendo tu confianza a tu ritmo.
Deja un comentario